Cuando sepas cuales cuales son las consecuencias de tener un alto índice de ácido úrico en nuestro organismo, te quedarás sorprendido de todo lo que nos puede causar. Hoy quiero enseñarte, que es el ácido úrico, como funciona, cuales alimentos lo contienen y sus consecuencias.
Sin duda, esto es un tema bastante importante y delicado, sobre todo para las personas que son adultos mayores, ya que tienen más probabilidades y riesgos de desarrollar la enfermedad causada por un exceso de ácido úrico.
El ácido úrico es una sustancia producida por el hígado derivada del metabolismo de la purina, que es un tipo de proteína presente en los alimentos ingeridos diariamente.
Históricamente los humanos presentan los niveles de ácido úrico más altos entre todos los mamíferos. Nuestros niveles de ácido úrico en la sangre no logran alcanzar niveles tóxicos sólo porque logramos eliminar el exceso a través de los riñones.
Síntomas de niveles elevados de ácido úrico:
Cuando hay una concentración de cristales de ácido úrico en las articulaciones, éstos provocan una intensa inflamación, teniendo como consecuencia una artritis muy dolorosa que recibe el nombre de gota. La gota sólo se desarrolla cuando existen muchos años de concentración de ácido úrico en las articulaciones.
La gota es un tipo de micro- artritis, es decir que afecta apenas una articulación en cada crisis. Las articulaciones más afectadas son las de los pies y las rodillas. La manifestación de la gota se caracteriza por la inflamación de una articulación con dolor, enrojecimiento, hinchazón y calor local.
La manifestación de la gota dura algunos días y después desaparece espontáneamente. El intervalo desaparición entre una crisis de gota y la próxima puede ser hasta de dos años.
Si la gota no es tratada adecuadamente conlleva la formación de tofos en las articulaciones que pueden ser únicos o múltiples, y pueden producir deformaciones.
La gota es causada por niveles elevados de ácido úrico sanguíneo. Aunque, no todo el que tiene ácido úrico alto desarrolla gota. La gota es mucho más común en hombres entre los 35 y 45 años, pero en las mujeres suele aparecer después de la menopausia.
Los principales factores de riesgo de la gota son:
• Consumo de alcohol.
• Ingestión elevada de alimentos ricos en purina.
• Usos de medicamentos que aumentan el ácido úrico, como diuréticos.
• Obesidad.
• Hipertensión.
• Trauma en las articulaciones.
• Largos períodos de ayuno.
Los alimentos ricos en purina (ácido úrico) son:
• Carnes: tocino, cerdo, vitela, cabra, cordero, hígado, corazón, riñón, lengua.
• Peces y frutos del mar: salmón, sardina, trucha, bacalao, huevos de peces, caviar, marisco, ostra, camarón.
• Aves: pavo y ganso.
• Bebidas alcohólicas.
Alimentos con moderada cantidad de purinas o ácido úrico:
• Carnes: vaca, novillo y conejo.
• Aves: pollo y pato.
• Frutos del mar: langosta y cangrejo.
• Legumbres: frijol, garbanzo, guisante, lenteja, espárragos, setas, coliflor, espinaca.
Alimentos con niveles bajos o con ningún nivel de purina o ácido úrico:
• Leche
• té
• café
• chocolate
• queso amarillo
• huevo cocido
• cereales como pan, pasta, torta de maíz
• patata
• arroz blanco
• maíz
• vegetales col, repollo, lechuga, acelga y berro.
• frutos secos, dulces y frutas incluso las ácidas.
¿Cómo se diagnostica la gota?
El diagnóstico se realiza cuando existe un cuadro clínico típico asociado a niveles elevados de ácido úrico. Cuando hay dudas sobre la causa de la artritis, el médico generalmente punciona el líquido de la articulación inflamada en busca de los depósitos de cristales de urato.
¿Cómo tratarla?
Se divide en dos etapas, tratamiento de las crisis y la profilaxis de las crisis. La gota no tiene cura pero puede ser controlada. Durante la crisis de gota, el tratamiento es realizado con antiinflamatorios comunes.
La colchicina al ser el menos tóxico que los antiinflamatorios controla la gota eficazmente, pero puede causar efectos secundarios, como náuseas, vómitos y diarrea.
Se debe evitar la aspirina lo más que se pueda, porque además de tener un alto grado antiinflamatorio también reduce la excreción del ácido úrico a través de los riñones.
Como la mayoría de los pacientes con ácido úrico elevado no desarrolla crisis de gota o cálculo renal, se inicia el tratamiento con medicamentos si se presenta un primer episodio de crisis de gota, cálculo renal.